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La realización de los deseos de Judas.

al traspasar el umbral se cumplirán los deseos más íntimos, que no son dinero, ni trabajo, ni amor.

al traspasar el umbral se cumplirán los deseos más íntimos, que no son dinero, ni trabajo, ni amor.

La habitación gótica era antigua, amplia y silenciosa. Sobrecogían sus ventanales con ángeles azules dibujados , iconografía con santos en pociones de sacrificio esculpidos en los capiteles.

Una larga cola de gente abrigada con polares hacia cola para entrar en esa habitación, donde sus deseos se harían realidad una vez traspasaran su umbral.

verdades profundas cuyo revelación al exterior harían que se cumplieran.

Todos los asistentes que habían acudido allí sabían  lo que ocurría en esa habitación:

Sus deseos se harían realidad.

solo hay que atreverse a pasarlo para que se hagan realidad los deseos.

solo hay que atreverse a pasarlo para que se hagan realidad los deseos.

Esa gente habían oídio hablar tanto de Cristo cómo de Judas, cuya recuerdo estaba esculpido sobre un pequeño altar con treinta monedas de oro alrededor de una soga custodiada por dos ángeles con corazas doradas y enormes espadas.

Yo miraba las monedas tratando de comprender por qué se ahorco Judas cuando tenía dinero, que era lo parecía que deseaba.

Una periodista anunciaba al mundo el milagro de la esperanza, y hacía entrevistas a la gente que estaba a punto de entrar en esa habitación sagrada y les preguntaba que iban a pedir:

Dinero, trabajo, prosperidad- contestaban, quizás fue lo que dijo Judas cuando le interrogaron sobre la causa de haber vendido a su compañero de partido político.

Deseos desde luego muy perturbadores para una utopía.

pero ¿ eran realmente verdaderos estos deseos que expresaba el lenguaje?

habitaciones de la muerte

habitaciones de la muerte

A mi modo de ver, los deseos más íntimos de Judas se cumplieron cuando sentenciaron a muerte a Cristo, su deseo verdadero era comprender y salvar la revolución por la que luchaba, basada en el sacrificio en la compasión hacia la debilidad de la naturaleza del hombre, y en el desprecio a la riqueza.

Él fue quien salvo la esperanza.

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Angelillo de Uixó.


La realización de los deseos de Judas. by Ángel Blasco Giménez is licensed under a
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Creado a partir de la obra en
angelillo201.wordpress.com.

Miguel de Cervantes Saavedra, los huesos del cofre del tesoro.

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la mandíbula rota de Cervantes,
dos tibias cruzadas en el fondo del cofre de Miguel,
llenó de alegría a la gente que esperaba gritar
cuando se destapó este tesoro:
Viva la utopía,
viva la locura.
Los corazones se llenaron,

cómo si fura un cáliz: del valor extraviado.
las mentes se poblaron de nuevo de imaginación: exiliada.
que provoco que se vieran en los edificios del gobierno,
en los bancos, en la bolsa, en las agencias de calificación,
gigantes que los desafiaban;
contra los que había que luchar.

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Entraron en las oficinas gentes de triste figura,
con lanza, palos, estoques,
y les dijeron a los gigantes,
Rindanse.
y aquellos, dueños de la fuerza,

y de todo por la fuerza,
su única virtud que les acompañaba.
los tomaron a risa,
por locos,
cómo a locos les respondieron:
váyanse con sus encantamientos a otra parte,
panda de desgraciados.

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hasta que notaron cómo sorprendidos Goliat heridos,
que les embestían con bravura.
maravillados de la locura de esa gente de triste figura,
muchos cortes les daban,
haciéndoles menguar a cada tajada,
que de gigantes acabaron enanos hijo putas.
dieron voces exclamando bajo pos pies de aquellos de la triste figura,
de por vivir,

los felones juraban que ellos eran también ciudadanos.
pero blandiendo los esclavos armados de la triste figura,
las palabras:
igualdad,
fraternidad,
y la libertad,
los aplastaban.
los gigantes cayeron al suelo cómo enanos apaleados, y nunca más se levantaron,
mientras hubo locos soñando.

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Por eso los gigantes se conjuraron para bajar los primeros a la cripta,
y dar fe junto a un notario con la calavera de Cervantes en la mano:

Estos huesos son de nuestra propiedad.

Don quijote que velaba el cráneo Cervantes,
se desmoronó sobre el papel,
convertido en tinta que goteaba por la cripta.
Un ruido de cadenas sonó,
y el pitido de la fabrica y la policía,
se clavo en el corazón de los que gritaban en la calle:
igualdad,
libertad,
fraternidad.

El cofre de cerró,
con una mandíbula, un cráneo, dos tibias.
Y fue embarcado a una isla desierta.

Angelillo de uixó. La fantasía al poder.
Miguel de Cervantes Saavedra, los huesos del cofre del tesoro. by Ángel Blasco Giménez is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 4.0 Internacional License.
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Corrola utopía y la obligación de Izquierda Unida.

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Resumen de los hechos:

La corrala utopía está formada por un colectivo de desahuciados. Se ha convertido en el símbolo internacional de España del movimiento autogestionado y civil, por ello, ante su desahucio producido por la alcaldía de Sevilla, Izquierda Unida, ha actuado cómo tiene obligación de hacer ante un símbolo de nuestra lucha. En estos momentos, todo símbolo debe estar por encima de cualquier orden o lista de espera, incluso por encima de la carne. Por eso han sido realojados de inmediato los desalojados de utopía, ya que Izquierda Unida tiene la bella obligación moral de hacerlo, y podía hacerlo. El resto de desahuciados de Andalucía que espera, debe comprenderlo, aceptarlo, y obedecer está obviedad. Mi consejo al resto de desahuciados de España es que deben seguir de cerca el experimento de utopía y ofrecerles todo su ayuda, al igual que a Izquierda Unida cuando hace las cosas bien y toma decisiones basadas en los principios morales e ideológicos correctos, que son los fundados en la justicia social.

Hail, oh hermanos.

Salud a Izquierda Unida por hoy.

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I. Corrala Utopía.

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A la oscura calle Sevillana, salpicada de luces intermitentes rojas y amarillas, han vuelto a llegar los desalojados de utopía. A su alrededor tristes casas con letreros atados con alambres del balcón de se vende o piso embargado. Ya la bandera del banco ondea en el poste de la antena del terrado de la corrala utopía.

Los coches patrullas rodean a los desahuciados que han concentrado en un estrecho circulo para dominarlos. A los agentes les llegan desde las ondas de las emisoras de los vehículos las voces de computadoras con las órdenes.

Una gota cae sobre la frente de un niño, y otra sobre un charco. La onda se extiende y llega hasta una pequeña flor amarilla que crecer junto a un bordillo.

Una niña se acerca a la flor gateando, cuando una mano envuelta en un negro guante de cuero la agarra, la levanta sin herirla, sin pronunciar palabra. Dentro de su casco suenan las órdenes que recibe por el pinganillo, y se escapa el sonido de una respiración artificial que asombra a la niña. Ríe al ser mecida por la máquina en el aire. Las luces eléctricas de los vehículos se reflejan en la visera del casco.

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La niña, sin daño es depositada de nuevo en el círculo. El agente vuelve a su precisa posición entre las otras máquinas. Sus padres firman unos papales que son llevados a las máquinas para que los escaneen.

Un ordenador dentro de una furgoneta no para de emitir papeles. Un altavoz va diciendo sin equivocarse los nombres de los habitantes de la córrala utopía. Una lluvia gris, fina, cae sobre los rostros pálidos de los desahuciados y varias palomas que están apostadas en la cornisa alzan el vuelo buscando techo.

Las gotas resbalan muy lentamente por la visera de los cascos y desparece en los gruesos uniformes negros blindados de los agentes.

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Los computadores desde las furgonetas siguen trabajando incesantes.

La flor amarilla junto al charco se abre.

Los vehículos, cómo radios que abandonan el circulo se retiran, forman una fila monótona salpicada de gotas de agua que se rompe sobre la chapa de las maquinas. Convergen todos hacia el mismo sitio siguiendo las instrucciones de las computadoras.

La voz de un miembro de la córrala utopía, con su casa tapiada a su espalda, exclama a sus compañeros con una sonrisa, abrazado a su mujer y su hija, sintiendo su cálido tacto, y las finas gotas de agua resbalando de sus negros mechones de pelo:

Es más fácil proveerse de vivienda que desprenderse de ella. El camino lo sabemos, y lo haremos todos juntos, nos encontraremos en nuestra travesía con gente solidaria.

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Angelillo de Uixó.

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A la utopía en el Ayuntamiento de Vall d’uixó.

Dedicado a la foto de Lluis en facebook.

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Si haguérem guanyat la guerra, aquesta imatge seria d’allò més normal en les nostres vides valleres.

Es triste contemplar la realidad.

La perdimos en la guerra.

Y lo normal y cotidiano,

es un universo de desesperanza.

Ese remoto clamor de cañones ha muerto.

Y esas voces de las asambleas de trabajadores,

entrando en el pleno, decidiendo, entendiendo la sociedad y su realidad,

se ha transformado en silencio de corderos.

Silencio cómplice ante una derecha que desangra a nuestra clase alienada.

Para mi no hay pueblo de Uixó.

Solo la clase proletaria o la nada.

Sin montes, ni valles, ni mares que la detengan.

Utopía, utopía, utopía Lluis.

La realidad actual es algo que no podemos contemplar sin  sentir asco.

Hambre, paro, corrupción, drogas, clase obrera pegando a inmigrantes, nazis gitanos.

Todo el poder en manos de los fascistas, grupos terroristas de derechas, jueces que son escualos , y los 120 días de Sodoma y Gomorra de los del PP en los burdeles.

Es menos entendible la realidad que la utopía.

Es más real la utopía que la realidad.

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Progres de vall d´uixó acuden a la romería de San Antonio.

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Día de San Antonio en Vall d´uixó, en la ermita dedicada al patrón los progres de izquierda acuden al follón.

Aldeanos, chonis, gitanos, perros, feministas, caballos, ecologistas, gatos, nazis, todos juntos vociferan mientras el padre bendice con desgana al ganado.

Los gatos hacen miau.

Los perros hacen guau.

Los patos hacen cuak.

Los nazis hacen hail.

Los gitanos hacen Ay, ay, ay.

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Los progres cuentan historias de almas en pena.

¿ te acuerdas Antonia, de aquella santona que en el mercadona pedía?

Oh, pobre desdichada criatura, que vida más desgraciada. Un día le di limosna.

Toma Cristina, una rica empanadilla-

Uy, si no es de espinas, mi estomago la rechaza. Y mi garganta la vomita, quita, quita, camarada esa porquería. El atún es delfín.

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Todos los progres cantan:

El atún es delfín,

El atún es delfín,

El atún es delfín.

La empanadilla de atún pasa por las manos de los progres y acaba en la basura.

Angelillo de Uixó acude a recibir su bendición.

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Dramático abre los brazos y estrecha con los progres las manos.

¿ habéis sido vosotros, eh canallas?

¿ a que si, eh, a que si , eh?

Los progres le rechazan.

Fuera asqueroso.

Pero Angelillo insiste:

¿ Decidme la verdad, por favor?

¿Habéis sido vosotros eh camaradas?

Por fin. Os felicito.

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¿ El que? Le pregunta un progre con síntomas de perder la paciencia.

Si sois vosotros los que habéis entrado en la ermita ayer y robado el equipo de música y los 20 euros. Estaría muy bien si habéis sido vosotros. Yo creo que si, y os felicito, y sobre todo por venir aquí a celebrarlo ante los beatos. Es genial, que se jodan.

Los progres se asustan y entre ellos hablan:

Tarde nos han dado el aviso.

Correr, correr hermanos, cada uno por un camino, que seguro que Angelillo, o Federico Jiménez lo santos o cualquier otro descrismado nos acusa de atraco en ermita con agravantes y alevosía de celebración. Huyamos de aquí, no hiramos la sensibilidad de ningún ciudadano. Correr, acudamos a pedir derecho de asilo a la facultad de políticas. EL último heterosexual.

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Angelillo de Uixó.


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